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Lencería: fina arma de seducción

Lencería: fina arma de seducción
Tal vez no lo sepas aún, pero la ropa íntima femenina es un punto clave a la hora de consolidar tu relación de pareja, sin importar que se trate de tu nuevo novio o del
hombre con quien llevas más de 10 años casada. Presta especial atención al
tejido, la confección y el color de la lencería que compras… lo vas a tener
comiendo en la palma de tu mano si lo haces




Equipo Editorial de MIS NIÑOS Y YO
La lencería siempre ha sido considerada una de las armas de seducción más efectivas. Todas sabemos que hasta el hombre más difícil y exigente se vuelve loco cuando es sorprendido con una lencería fina. Prestar especial atención al tejido, confección y color de la prenda a la hora de comprarla, asegura la posibilidad de tenerlo comiendo de la palma de tu mano. ¿Y qué puede producir mayor excitación que saber que lo tienes extremadamente excitado a él? Todo de una manera elegante, cómoda y sencilla que puedes resumir en una palabra: lencería.
Quizá el aspecto más divertido de estas prendas íntimas, sea el hecho de que ambos pueden ir a comprarlas juntos, una aventura que es, por sí sola, suficiente para estimular la imaginación. Igualmente, él puede sorprenderte regalándote un conjunto inesperadamente. En fin, las posibilidades son muchas.
* Modelo ideal
Ciertamente, la lencería no tiene nada que ver con los vestidos y conjuntos que vistes rutinariamente, ni siquiera con la ropa íntima que utilizas en los días “comunes”. Estas prendas, rodeadas de un cierto halo mágico, se encuentran reservadas para noches de placer, en las que quieres sorprender a tu pareja y ¿por qué no? ser sorprendida por él.
Cada elemento que conforma una lencería perfecta –el tejido, confección y color– tiene su encanto particular que apunta a una sola dirección: ahogar los sentidos en un mar de seducción.
* Según el tejido
Hay algunos extremistas que afirman que el algodón y la pasión son como el agua y el aceite. Pero no te engañes: este tejido también tiene sus encantos. De hecho, la mayoría de los hombres no pueden resistirse a un cándido e inmaculado conjunto de algodón de dos piezas.
Por otro lado, el raso y el satín son probablemente los materiales que todo el mundo elogia por su gran capacidad para seducir y excitar. No obstante, la decisión es completamente tuya: recuerda que el conjunto lo hace quien lo lleva.
* Según la forma
Es muy difícil encontrar una posición unánime en este aspecto. ¿Cuál prenda es la más sexy? Tenemos tantas opciones –corsés, bodies, tangas, batas transparentes, sujetadores, ligueros con medias panty, entre otros– que parece casi imposible decir cuál de todas es la que tiene mayor encanto. Una vez más, te toca a ti decidir cuál prenda va con tu estilo y el de tu pareja. Toma en consideración los gustos de ambos a la hora de seleccionar: de ello dependerá el éxito de tu misión.
* Según el color
Al fin entramos en aguas más claras, puesto que aunque la variedad de colores es realmente impresionante, el rojo (con todas sus variaciones) y el negro son los que se imponen con mayor fuerza. De cualquier manera, no te las compres todas de un mismo color, recuerda que en la variedad está el gusto. Hoy en día, el mercado ofrece alternativas como el verde, azul marino, amarillo, morado o gris que también tienen sus fans.
* Ponérsela y quitársela:
Manejando el arte de la sensualidad
La lencería tiene su encanto, pero la verdad es que al final todo depende de ti. Luz tenue, música envolvente y movimientos delicados y provocativos, son necesarios a la hora de seducir a tu pareja. Sí, quizá no eres una “striper” profesional: no repares en ello, lo mejor que puedes hacer es improvisar y actuar con naturalidad.
Para obtener resultados espectaculares, debes sentirte cómoda y relajada en todo momento. No te preocupes por lo que él está pensando: desnudarte (permitiendo que él te ayude, incluso) mientras bailas es algo que él apreciará más de lo que imaginas. No importa si no te sale todo a la perfección, lo que interesa es que los dos la están pasando de maravilla.
Aprovecha tú también
Ellos disfrutan mirando, tocando, poniendo y quitando pero, ¿y tú? Aunque lo más seguro es que estés disfrutando el momento tanto como él, no tienes por qué conformarte con ser el objeto de deseo suyo todo el tiempo. Intercambien roles, pídele que asuma un papel protagónico en el juego de la seducción.

La ropa íntima masculina se ha renovado muchísimo en los últimos años y no se puede negar que hay muchos modelos que resultan bastante provocativos para nosotras. Una manera fácil de presentarle la idea es mostrándole un catálogo de ropa íntima masculina y comentándole cuánto te gustaría verlo con uno de esos sugerentes boxers o interiores. Y si todavía no se da por enterado, toma las riendas de la situación, cómprale una prenda bien sexy y déjasela sobre la almohada: verás que no se resiste.
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