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Maternidad Guía para madres exhaustas

Guía para madres exhaustas
No es fácil admitirlo. Incluso, muchas mujeres ni siquiera se atreven a colocarse
un traje de baño. Sólo pensar que esos “huequitos” en las piernas serán descubiertos por alguien más que el espejo, causa horror. Y es que esa “piel de naranja”, como
la llaman algunos, parece invencible
Equipo Editorial de MIS NIÑOS Y Y

¿Cansada? No, no vayas a malgastar la poca energía que te queda contestando la pregunta: las investigaciones demuestran que las mamás de bebés y niños pequeños pierden entre 400 y 750 horas de sueño anualmente. Todo parece atentar contra tu merecido descanso de 8 horas diarias: cuidar al pequeño, preparar la comida, atender las responsabilidades de la oficina… pero, si logras mantener los ojos abiertos durante el tiempo suficiente como para leer este artículo, te garantizamos que recuperarás tu energía más rápido de lo que imaginas.
Duérmete ya
Una vez que tu cabeza descanse sobre la almohada, deberías dormirte entre 10 y 20 minutos. Y si te toma más de media hora, entonces algo está saliendo mal. Pero, antes de ponerte a contar ovejas, sigue algunas sugerencias que funcionan bastante bien.
Evita el cafecito taciturno 

La cafeína actúa en el organismo durante 12 horas, por lo que el café o té que disfrutas en la tarde pueden interferir con tu descanso nocturno. En caso de que debas, a juro, tomarte un “con leche”, limítalo a la mañana.
Cuadra tus ejercicios 

La actividad física regular previene el insomnio, pero sólo si se realiza en el momento adecuado. Si ejercitas tres horas antes de irte a la cama, por ejemplo, puedes tener dificultad para dormir, a causa de los altos niveles de adrenalina en tu organismo. Según los especialistas, los mejores momentos para hacer ejercicios, son la mañana o la tarde.
Nada de tareas en el dormitorio 

Cuando realizas actividades estresantes antes de irte a dormir, vas a tener mayor dificultad para conciliar el sueño. Lo mejor que puedes hacer es tomar un baño de agua caliente y leer un buen libro antes de acostarte. ¡Ah! por cierto, no vayas a escoger un libro de suspenso: recuerda que necesitas algo que te relaje, no que te perturbe.
Mejora la calidad de tus sueños
Seis horas de sueño consecutivo son mucho mejores que ocho interrumpidas: luego de 30 minutos dormida, entras en la fase más profunda de sueño –en última instancia lo que te hace sentir fresca y descansada en la mañana siguiente. ¿Qué puedes hacer para dormir sin tener que levantarte cada dos minutos a causa del bebé?
Llega a un acuerdo con tu pareja 

Casi todo bebé necesita atención una o varias veces por noche. Y, por lo general, es mamá la que tiene que ir a ver qué le pasa al pequeño. Sin embargo, puedes llegar a un acuerdo con tu pareja, de modo que compartan la responsabilidad.
Consume más de 1200 calorías por día 

Muchas mujeres se encuentran tan obsesionadas con su peso, que no consumen la cantidad de calorías diarias que su cuerpo necesita y, a causa de esto, se levantan con hambre en medio de la noche. También ten en consideración que no es bueno consumir la mayor cantidad de calorías diarias antes de dormir: podrías tener pesadillas o experimentar acidez estomacal.
Ponle pasión a tus noches 
Sí, ya sabemos que este tipo de comportamientos fue lo que te llevó a tener que despertarte a las 2 de la mañana en primer lugar, pero las investigaciones demuestran que alcanzar el orgasmo incrementa la producción de endorfinas, químicos cerebrales que promueven el sueño profundo.
Antes de levantarte…
De acuerdo a las investigaciones más recientes, la mayoría de las mamás se levantan mucho antes de lo que deben. Intenta dormir 20 minutos más de lo que acostumbras y habrás acumulado 2 horas y media en una semana. Toma nota de algunos truquitos para que mantengas los ojos bien cerrados durante más tiempo:
Quédate en la oscuridad 

Es probable que te despiertes si la luz del sol mañanero se cuela por tu ventana. Pero, si colocas cortinas gruesas o persianas en las ventanas de tu habitación, lograrás dormir plácidamente aunque salga el sol.
Pídele ayuda a los niños 

Si tienes un hijo mayor de 6 años, puedes pedirle que colabore contigo los fines de semana comiendo cereal con leche. Este es un desayuno que él puede “preparar” y que te permitirá a ti dormir un poco más.
Evita la tentación del vasito de agua nocturno 

Es posible que, luego de atender a tu bebé, a media noche se te antoje tomarte un vaso de agua. Pero, es importante que tengas en cuenta que si lo haces, te pueden dar ganas de ir al baño mientras duermes y vas a tener que levantarte antes de lo que quisieras.
Ponle un parado a sus ronquidos 

Cerca del 30% de los hombres comienzan a roncar en sus treintas. Estos inusuales sonidos pueden ser un problema mayor para ti, sobre todo si no estás durmiendo lo suficiente a causa del nuevo huésped. Tdú puedes evitar ser víctima de los ronquidos de tu pareja: pídele que duerma de lado o reemplaza su almohada esponjosa por una más plana: ambas opciones son soluciones fáciles de poner en práctica.
Bueno, ya sabes lo que tienes que hacer para tener un descanso más plácido y duradero. Después de todo, necesitas estar en perfectas condiciones para encargarte adecuadamente de tu pequeño: de poco le sirve tener una mamá exhausta.
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